entidades financieras no van a tener otra alternativa que cumplir con las nuevas provisiones

Nin cifra en 50.000 millones las nuevas exigencias a la banca
JOAN CARLES VALERO | BARCELONA Domingo , 30-05-10
José María Roldán, director general de Regulación del Banco de España, afirmó ayer que las entidades financieras no van a tener otra alternativa que cumplir con las nuevas provisiones, ya que «el papel de un banco o una caja no es constituirse en una inmobiliaria, sino conceder crédito». A su juicio, la mayor exigencia obedece a que «queremos asegurarnos de que van a sobrevivir al peor escenario».
La reforma que se negocia en Basilea III «puede suponer» a la banca española exigencias adicionales de capital de entre 40.000 y 50.000 millones de euros, según reveló ayer Joan Maria Nin, director general de La Caixa, en su participación junto a Roldán en las jornadas del Círculo de Economía de Sitges.
La reforma se prevé que entre en vigor a finales de 2012, aunque con un periodo transitorio de unos cinco años, según señaló Roldán, y su aplicación supondrá que las entidades financieras españolas deberán tener 300.000 millones de liquidez adicional, subrayó Nin.
El directivo del Banco de España reconoció que la mayor exigencia de capital y liquidez orientará a las entidades hacia un modelo «más tradicional, más cauto y menos de mercado», aún a costa de que el crédito se encarecerá. Roldán reclamó la necesidad de complementar el crédito con el desarrollo de mercados de capital riesgo «para evitar los posibles efectos potenciales que una banca más conservadora pueda tener sobre los proyectos empresariales».
Ausencia de relato
En su intervención, Nin subrayó que la situación de España frente a los mercados también es fruto de la falta de un relato compartido sobre nuestra verdadera realidad, porque «los problemas de liquidez derivan en problemas de confianza», aseguró. Josep Oliu, presidente de Banco Sabadell, coincidió con Nin al añorar la Transición o la entrada de España en el euro para aunar la visión de España.
Con los números en la mano, Nin defendió que a igualdad de deuda que otros países, como Reino Unido u Holanda, «a España nos valoran peor» por la ausencia, insistió, de una puesta en valor.